jueves, 3 de diciembre de 2009

IV

¡Sólo imagínatelo! ¡Nada más! Estaba allí parado con la jarra en la mano.
¡Todavía llevaba puesta la remera blanca! Ja ja - Se aferró al volante y apoyó su frente en él. No paraba de reir. -¿Entiendes? ¡Fue una noche de locos amigo!

-Me miró un instante, aún sonriente y tocó la bocina -Bueno, ¿Vamos a mover esta cosa,chico?

-¿Por qué tardaste tanto? Dijiste dos noches, empezaba a preocuparme- Realmente, no sabía si debía decirle lo que había sucedido, sólo esperaba el mejor momento, algo más tranquilo...
-Tú sube los cacharros y ese "equipaje" tuyo- Su rostro volvió a cambiar y miró justo donde esperaba que no lo hiciera.- Espera chaval, ¿y Lucy?- No llegue a ocultar mi expresión, ni a cerrar la caja.- ¿Donde...?
-No quería decírtelo todavía.Lucy...bueno, digamos que no estaba muy conforme con su dieta sintética...-Empecé a decir.

Esto se iba a poner bueno.

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